Contacto del fabricante: Haribo GmbH & Co. KG, Dr.-Hans-und-Paul-Riegel-Straße 1, 53501 Grafschaft, Alemania.

2018: 125 cumpleaños del fundador de la empresa Hans Riegel
Hans RiegelEl 3 de abril de 1893 nació en Bonn el fundador de Haribo.

Un saco de azúcar, una placa de mármol, un taburete, una chimenea de ladrillo, una tetera de cobre y un rodillo: Hans Riegel difícilmente podría haber soñado que este capital inicial se convertiría en una empresa de fama mundial. Hace 125 años nació el fundador de Haribo, la empresa mundialmente conocida por sus chicles de frutas. 29 años más tarde, este visionario y capacitado fabricante de caramelos inventó el Goldbären, y con este invento dorado allanó el camino para una empresa inconfundible que sigue siendo de propiedad familiar.

Tras completar su aprendizaje como fabricante de caramelos y adquirir cierta experiencia profesional, Hans Riegel, de 27 años, dio un gran paso e inscribió la empresa Haribo en el registro mercantil como acrónimo de HAns RIegel BOnn el 13 de diciembre de 1920. Hans Riegel empezó a fabricar sus caramelos en una casa del barrio de Kessenich, en Bonn, primero solo y luego junto con su primera empleada, su esposa Gertrud. Sólo dos años más tarde, inventó el antepasado del Oso de Oro, el Oso Bailarín, que inicialmente se distribuía a los clientes en bicicleta.

El invento más dulce de Hans Riegel: Los Ositos de Oro Haribo
Casi 100 años después, Haribo produce cada día alrededor de 100 millones de Ositos de Oro en todo el mundo. La calidad del producto Osito de Oro en cuanto a su inconfundible forma, consistencia y características de sabor se ha establecido de forma impresionante en los mercados más allá de las fronteras nacionales. Los populares Ositos de Oro se han convertido en un éxito de ventas internacional y son codiciados en todo el mundo. Llevan deleitando a consumidores grandes y pequeños desde 1922 y alegran cada día. Los clásicos están disponibles en los sabores de naranja, limón, fresa, frambuesa, piña y manzana.

De la cocina del patio trasero al líder del mercado mundial
Lo que empezó como una audaz aventura de Hans Riegel se ha convertido en una parte indispensable del mundo de los dulces. Como empresa familiar tradicional y fabricante de confitería de renombre mundial, Haribo da trabajo a un total de unos 7.000 empleados. Entre otras cosas, la nueva sede de Grafschaft, que ofrece las líneas de producción tecnológicamente más avanzadas del mundo en el sector de la confitería, garantiza unas condiciones de trabajo de vanguardia. No obstante, el centro de producción de Bonn, que sigue siendo una unidad autosuficiente, sigue desempeñando un papel importante para el fabricante de confitería.

Calidad: la máxima prioridad
Haribo establece estándares muy elevados para la calidad de las materias primas utilizadas en sus productos. Por esta razón, todas las plantas de producción de Haribo en todo el mundo también fueron certificadas a finales de 2017 de acuerdo con FSSC 22000 (Food Safety System Certification 22000), que goza de un alto nivel de aceptación en el comercio internacional y representa el más alto nivel de estándares de calidad y seguridad a lo largo de toda la cadena de producción y suministro.

La "calidad" está formada por varios componentes individuales. Por un lado, las materias primas de primera clase son indispensables para ofrecer constantemente una calidad convincente. En segundo lugar, es esencial controlar meticulosamente todo el proceso de producción, y hacerlo al más alto nivel tecnológico. Además, para nosotros es especialmente importante que cada empleado fomente el nivel de calidad de nuestros productos con su compromiso personal. Siempre asesoramos a nuestros socios comerciales sobre las condiciones correctas de almacenamiento de nuestros artículos para que nuestra mercancía no sufra ninguna pérdida de calidad en las estanterías.

En resumen, hacemos todo lo posible por mantener nuestra filosofía de "Calidad por encima de todo".